Una vez me contó un guitarrista
que Dios se sienta
frente a un antiguo combinado
mientras Asimov a su lado
escribe el futuro de todos.
Los auriculares, para Dios,
son necesarios
nadie más puede escuchar su música
le regalaron unos nuevos
de esos blancos y grandes
que todos llevan a sus trabajos.
Él los ve
y se apiada de nosotros
sabe que la música
cuando aísla
te pudre por dentro.
...